Bandoneón

Si, sigo con Benedetti, me encanta!! Y a pesar que este poema ya lo publiqué en Resurgiendo, me gusta mucho y lo posteo de nuevo que tanto! Igual no es la misma gente la que pasa por aquí que en el otro blog, así que disfrúten leyendo esto:

Me jode confesarlo
pero la vida es también un bandoneón
hay quien sostiene que lo toca Dios
pero yo estoy seguro que es Troilo
ya que Dios apenas toca el arpa
y mal.

Fuere quien fuere lo cierto es
que nos estira en un solo ademán purísimo
y luego nos reduce de a poco a casi nada
y claro nos arranca confesiones
quejas que son clamores
vértebras de alegría
esperanzas que vuelven
como los hijos pródigos
y sobre todo como los estribillos.
Me jode confesarlo
porque lo cierto es que hoy en día
pocos
quieren ser tango
la natural tendencia
es a ser rumba o mambo o chachachá
o merengue o bolero o tal vez casino
en último caso valsecito o milonga
pasodoble jamás,
pero cuando Dios o Pichuco o quien sea
toma entre sus manos la vida bandoneón
y le sugiere que llore o regocije
uno siente el tremendo decoro de ser tango
y se deja cantar y ni se acuerda
que allá espera
el estuche.

Mario Benedetti - Uruguay

2 comentarios:

Hermoso poema, no recuerdo haberlo leído. Y qué cierto es lo que dice. Un beso.

Estupendo blog. Me gustó muchísimo. todo mi apoyo para ti, bella mujer interior.

Publicar un comentario

Compartir

Twitter Delicious Facebook Digg Stumbleupon Favorites More